Para realizar esta intervención se recomienda que la paciente esté sana y se la considere estable emocionalmente. Está indicada en mujeres con hipomastia primaria (falta de desarrollo mamario en la adolescencia), hipomastia secundaria a embarazos, lactancias, pérdidas de peso y en aquellas que tienen malformaciones, mamas tuberosas o asimétricas.
Se deberá evitar la intervención cuando haya cualquier enfermedad durante la historia clínica o los análisis preoperatorios. La edad aconsejada es a partir de los 18 años aproximadamente. Cuando la paciente llega a la consulta se le explicarán las distintas técnicas quirúrgicas, se discutirá el tamaño y la forma que tendrán sus mamas y las opciones o la combinación de procedimientos que sean mejores.
Consiste en colocar una prótesis de gel de silicona detrás de la glándula mamaria o del músculo. Se realiza a través de una incisión en el surco submamario, en la axila o en el borde de la areola. Se tendrán en cuenta las características propias de cada paciente.
Antes de la intervención se realizará una exhaustiva valoración preoperatoria que comprenda una analítica y una mamografía. Se deberán seguir unas normas establecidas, relacionadas con la toma de alimentos y líquidos, tabaco o toma o supresión de medicamentos, vitaminas o suplementos de hierro.
La operación quirúrgica se lleva a cabo en un quirófano, dentro de una clínica u hospital. No suele ser necesario el ingreso, salvo que se utilice anestesia general, dándose de alta al día siguiente. Se utilizará anestesia local o general. Una vez realizada la incisión anteriormente descrita (areola, axila o surco submamario) se levantará el tejido mamario, creando un bolsillo donde se colocará la prótesis, justo debajo del tejido mamario o del músculo pectoral. La incisión será de 3 a 5 cm aproximadamente. Una vez insertado el implante se realizará una sutura intradérmica, para que la cicatriz sea lo más imperceptible posible.
La silicona no provoca respuesta inmunológica y es utilizada en muchos casos como en catéteres de UVI, válvulas cardíacas, prótesis de testículos, etc…Hay que tener en cuenta que un encapsulamiento no es sinónimo de rechazo, como un órgano transplantado.
Es la aplicación de la liposucción a distintas áreas corporales a la vez, con el objetivo de conseguir un resultado más armonioso y proporcionado en toda la silueta, ya que mejoramos varias zonas simultáneamente.
Es una técnica que no puede realizarse con cualquier persona, aunque es la más solicitada en una consulta. Las personas que deseen esta técnica tienen que tener buen estado de salud (no influye la edad), estabilidad psicológica, realista en las expectativas y que no se hayan sometido a ninguna intervención reciente en las zonas a tratar. Aunque parezca contradictorio, la liposucción no puede llegar a ser tan buena en aquellas personas que padezcan sobrepeso como en aquellas que tengan depósitos grasos localizados y con una piel con buenas características (sobre todo firme y elástica).
Se tratarán áreas del organismo que tienen un tipo especial de tejido graso como las caderas (michelines), muslos (pistoleras), rodillas, abdomen, papada, brazos, espalda, glúteos, pantorillas, tobillos, etc, ...
Una liposucción puede tener las complicaciones de cualquier intervención quirúrgica y deben ser comentadas con su cirujano. En principio se trata de una técnica muy segura si los medios materiales y humanos son los adecuados.