Varices


En Clínica Ramón y Cajal somos expertos en la eliminación de varices y venas marcadas en las piernas. Nuestros médicos examinarán tu caso de forma personalizada y según tus características y preferencias se realizará un tratamiento a tu medida. Además, nuestros centros de Antequera y Málaga, Córdoba y Lucena, cuentan con tecnología punta para conseguir los mejores resultados.

¿Qué són las varices?

Son la manifestación externa de alteraciones en las venas y, debido a diversos factores, se ensanchan, dilatan y se vuelven tortuosas provocando problemas de flujo sanguíneo y de estética. Es una enfermedad crónica y evolutiva.

Su aparición es el resultado de una serie de factores causales, algunos controlables (como la obesidad) y otros no (como es el factor hereditario).

  • Estar de pie o sentado durante periodos largos de tiempo: De este modo aumenta la presión hidrostática con el consecuente esfuerzo que debe realizar el sistema circulatorio para cumplir su función de retornar la columna sanguínea al corazón.
  • Edad: Suele aparecer entre los 30 y 70 años. Es una enfermedad progresiva y crónica que empeora con el tiempo.
  • Sexo: Aparece preferentemente en mujeres más que en hombres, en proporción de 5 a 1.
  • Embarazo: A raíz de los cambios que se producen en el cuerpo con la aparición del embarazo las venas sufren la influencia de varios factores que producen la enfermedad (aumento hormonal, compresión del útero grávido sobre las grandes venas y la tendencia al aumento excesivo de peso).
  • Factor hormonal: Los ciclos menstruales inciden directamente sobre las venas mediante las hormonas.
  • Factor genético: Las varices son hereditarias. Si algún miembro de la familia padece varices es más probable su aparición.
  • La obesidad: Provoca un exceso de trabajo en nuestro torrente sanguíneo y por consiguiente da origen a la aparición de varices.
  • Menopausia: Este desajuste hormonal provoca alteraciones en las venas que da origen a la aparición de varices.

Tipos de varices

  • Arañas Vasculares (GRADO I): Son dilataciones a nivel de las pequeñas venas de la piel cuya repercusión es netamente estética. Presentan problemas estéticos aunque en ocasiones pueden producir sensación de pesadez y cansancio en las piernas.
  • Varices Reticulares (GRADO II): Son de tamaño mediano. Este tipo de varices ya empieza a ser un problema para la salud. Normalmente se desarrollan con la edad, produciendo flebitis superficiales dolorosas o pequeñas varicorragias (sangrado de una vena).
  • Varices Tronculares (GRADO III): Son varices de gran tamaño y se desarrollan a nivel de los troncos venosos superficiales de los miembros inferiores y pueden tener un gran calibre. Pueden presentar problemas tales como varicoflebitis (trombosis de la variz), úlceras o hemorragias. Su tratamiento es obligatorio debido ya que presentan problemas serios para la salud.

Síntomas

La sintomatología va desde molestias, calambres, ardor, picazón, sensación de pesadez, adormecimiento hasta dolor, hinchazón, que conlleva a incapacidad funcional progresiva, dependiendo del grado.

¿Cuándo y por qué se deben operar?

Es el tamaño de las varices y el compromiso de los troncos venosos principales los que determinan la necesidad de operarlas.

Se deben operar para evitar sus frecuentes complicaciones que a corto plazo son la varicoflebitis (trombosis de la variz), con el consiguiente riesgo de embolia pulmonar, y la varicorragia (sangrado por rotura de una variz). Las complicaciones a medio-largo plazo consisten en la aparición de atrofia y pigmentaciones en la piel de pies y tobillos con tendencia a la ulceración.

No se deben operar todas aquellas de la rama de las safenas, venitas o varículas. Para éstas se realiza la esclerosis, que explicaremos más adelante.

Tratamiento

Existen varios tratamientos disponibles para mejorar el aspecto físico de las piernas, para aliviar los síntomas asociados a la aparición de las varices y para evitar complicaciones derivadas sucesivas. Dependiendo de la severidad de las varices tendremos: tratamiento no quirúrgico y tratamiento quirúrgico.

Tratamiento no quirúrgico.

  • Técnica de esclerosis vascular: Consiste en la aplicación directa en la vena de una inyección con una sustancia esclerosante que anula la variz y la hace desaparecer. Dependiendo de la forma de aplicación podemos encontrarnos la esclerosis convencional (en estado liquido), crioesclerosis (a baja temperatura) y microespuma (en forma de espuma). Es un proceso sencillo y eficaz, no agresivo y que se realiza de forma ambulatoria, sin anestesia, sin cicatrices y sin cirugía.
    Las sesiones son semanales y el número de ellas dependerá de la cantidad, extensión y grosor de las varices a tratar. Una sesión viene a durar alrededor de 30 minutos. Las varices que se tratan son eliminadas en su mayoría. Algunos pacientes pueden requerir la combinación de otras técnicas para mejorar los resultados. Como complicaciones derivadas del tratamiento podría darse la aparición de equimosis (alteración de la coloración de una zona de la piel), hematomas extra e intravaricosos, pigmentaciones residuales, pequeñas lesiones cutáneas y reacciones alérgicas tanto al esclerosante como a los materiales utilizados en la compresión externa (vendajes, esparadrapos, etc..).
  • Aplicación láser o fotoesclerosis: Es la utilización de un láser para tratar las varices pequeñas o arañas vasculares y consigue unos resultados excelentes para varices de hasta 4 milímetros. Trata selectivamente las lesiones vasculares sin afectar el tejido que rodea la variz. El láser atraviesa la piel y coagula la sangre de la vena varicosa. Con el tiempo el cuerpo absorbe el coágulo y éste desaparece. Es un tratamiento indoloro y en las zonas más delicadas puede aplicarse una anestesia tópica unos 30 minutos antes de la sesión. El número de sesiones variará según el estado del paciente y el intervalo de cada sesión debe de ser de un mes aproximadamente.

Tratamiento quirúrgico.

  • Cirugía ablativa.
    • Stripping: Se utiliza en paciente que tengan varices medianas y grandes y supone la escisión de la vena afectada. Se trata de una técnica en la que al enfermo se le somete a una intervención quirúrgica importante para extirparle las varices. Esto significa que el paciente recibirá anestesia epidural o general y sufrirá un prolongado tiempo de baja posterior que incluye hospitalización de 24 a 72 horas. Además, requiere un reposo completo de 8 a 10 días y un absentismo laboral de 1 mes. Este tipo de intervención puede dar complicaciones a nivel local y no es radical.
    • Endoláser: Está especialmente indicada para pacientes que tengan varices recidivantes, pacientes con problemas de coagulación, enfermos de edad avanzada o con un historial médico específico que no les permita caminar trayectos más o menos largos. Consiste en eliminar las venas varicosas mayores de 2-3mm mediante el calor emitido por la luz láser. Las zonas adyacentes a la variz se infiltran con anestesia local y suero para evitar la trasmisión del calor del láser y el dolor al eliminarlas.
  • Cirugía hemodinámica (Cura hemodinámica de varices-CHIVA): Es una estrategia quirúrgica que consiste en eliminar las varices y respetar las venas sanas y se basa en el estudio minucioso de las varices con el Eco-Doppler. Se realiza un mapa de toda la red de venas superficiales y profundas con sus direcciones de flujo. Se utiliza anestesia local, no requiere ingreso, no requiere preoperatorio, no requiere coger baja, garantiza un postoperatorio con vida normal y se obtiene un resultado estético óptimo.
    Se realiza a través de una punción o incisión se introduce una fibra óptica en el interior de la vena enferma. Mediante la aplicación de impulsos de energía láser en el interior de la vena esta se colapsa y cierra en los puntos decididos con el marcaje y bajo control directo con Eco-Doppler.

Cómo prevenir

No existe un sistema seguro para evitar las varices, ya que en su aparición pueden influir muchos factores ya descritos anteriormente. El mejor tratamiento es una vida más equilibrada, evitar el sedentarismo y el estar de pie y quieto lo menos posible, además de practicar algún deporte, hacer ejercicio físico, hacer gimnasia o que nos hagan masajes, ya sean manuales, mecánicos o por presoterapia, porque todos ellos facilitan la circulación venosa.




Eliminación de las manchas de la piel


La piel es el órgano más extenso del cuerpo, al que recubre en su totalidad. Además de actuar como escudo protector contra el calor, la luz, lesiones e infecciones, la piel también cumple las siguientes funciones: regula la temperatura corporal, almacena agua y grasa, es un órgano sensorial, evita la pérdida de agua y previene la entrada de bacterias.

Las características (es decir, el grosor, el color, la textura) de la piel no son uniformes en todo el cuerpo. Por ejemplo, la cabeza presenta más folículos pilosos que cualquier otra parte, mientras que la planta de los pies no tiene ninguno.

La piel puede sufrir la aparición de manchas que son alteraciones en la coloración de la piel debido a, principalmente, la falta o exceso de pigmentación y la excesiva exposición al sol. En nuestra Clínica Ramón y Cajal desarrollamos tratamientos específicos para la limpieza y eliminación de manchas. El equipo especializado que forma parte de nuestra plantilla en los centros de Antequera, Málaga, Córdoba y Lucena, harán un estudio exhaustivo de las características de tu piel para aplicar el método adecuado.

Tipos de Manchas

  • Manchas producidas por una excesiva exposición al sol: Es la principal causa de aparición de manchas en la piel. No sólo al tomar el sol sino la exposición a la luz visible diaria produce un aumento de melanina (sustancia causante de la pigmentación de la piel).
  • Manchas aparecidas durante el embarazo: Son manchas que se producen por una alteración hormonal durante esta época. Se denominan melasma o cloasma. También la ingestión de anticonceptivos durante ciertos períodos o de hormonas durante la menopausia pueden facilitar su aparición. Se exteriorizan en la cara, frente, mejillas y pecho.
  • Pecas: Son acumulaciones de pigmentación que se producen en forma redondeada y no uniforme sobre la piel. No presentan ningún problema para la salud y pueden desaparecer con la edad. Son más abundantes en personas de piel blanca que en personas de piel morena. Se hacen más copiosas e intensas con el sol.
  • Lunares: Pueden ser desde marrones hasta negros, con aspecto plano o en relieve. Se producen por un aumento de pigmentación o por acumulación de diversos vasos sanguíneos.
  • Manchas de nacimiento: De color rojizo o marrón. Tienen su origen desde el nacimiento y presentan formas y tamaños muy variados.

Tratamiento

Tecnología Láser: Esta tecnología ha evolucionado de tal manera que la mayor parte de las lesiones pigmentarias pueden ser borradas. El tratamiento de las manchas consiste en la aplicación de la Luz Intensa Pulsada o IPL. Es fundamental posteriormente prescribir un tratamiento tópico para aplicar en casa. Para casos de manchas más rebeldes también se emplea el láser de Neodimio_Yag Q-switched.

La energía lumínica es absorbida por el pigmento, produciendo una termocoagulación selectiva de la mancha, sin dañar la piel de alrededor.

Las sesiones duran varios minutos y se realizarán varias sesiones para eliminar las manchas, dependiendo el número de éstas y del tipo de paciente (edad, profundidad, etc…). No necesita anestesia local. Los resultados son visibles desde la primera sesión.

Efectos secundarios

No posee efectos secundarios. Las molestias son pocas, una pequeña sensación de escozor que se calma con un poco de hielo. Los pacientes experimentarán decoloración o enrojecimiento temporales de la piel en la zona tratada. Se hace vida normal al finalizar el tratamiento. No deja cicatrices. La recuperación es total y el resultado final se obtiene entre las 4 y las 6 semanas después de su aplicación.

¿Se eliminan todas las manchas?

No todas. Dependerá de la profundidad a la que está la melanina, aunque un alto porcentaje de ellas desaparecerán. Como hemos mencionado en un apartado anterior las más rebeldes necesitan un láser de neodimio-Q switched.

Precauciones

Las precauciones que se deberán tomar es evitar la irradiación solar en las zonas tratadas por un máximo de dos meses después del tratamiento y no frotar ni enjuagar la zona con productos abrasivos de limpieza de la piel.

LToda mancha o zona pigmentada que queramos eliminar de nuestra piel debe ser previamente valorada por un médico especialista que será quien nos dirá y nos asesorará sobre la conveniencia o no de aplicar un tratamiento en concreto.